Huentelauquen. Domos de Huentelauquen.

Empezábamos un nuevo paseo, sin la Patty por su trabajo pero si con Maxi, Cony y nuestra perra Mili (que la tenemos a dieta).

Solo tres días para aprovechar un tiempo libre, pero muy entretenidos, destino Huentelauquen, hacia un terreno llamado Domos de Huentelauquen.

264 km. Al norte de Santiago, muy conocido por sus empanadas pero también con una costa espectacular.

El acceso es en Huentelauquen Alto, teniendo como referencia un servicentro Shell que es donde está el retorno de la carretera para cruzar a la caletera poniente. Frente a la pasarela peatonal encontraran un camino que lleva hacia la costa. Acá encontrarán algunos negocios que tienen de todo para abastecerse y también donde venden un pan amasado súper bueno.

Son 3 km. de camino de tierra bueno con algunos sectores regulares, pero apto para todo vehículo sin necesidad de 4 WD, pero conduciendo lento.

Pueden contactar a los dueños Rubén o Claudia que los van a buscar al portón de acceso para no perderse en la ruta.

Es un camino bonito donde encontraran quebradas, múltiples animales pues crían ovejas y cabros, con liebres cruzando el camino.

Llegaran a un sitio que por el momento no tiene instalaciones, con solo dos domos en construcción, porque es un proyecto que recién está partiendo.

 Está sin luz y punto de agua potable muy lejano,  sin sitios demarcados y sin baños exclusivos para el camping. Eso se soluciona con baños que están en una casa que está en el mismo lugar.

Sin embargo, los dueños están muy comprometidos con el proyecto y ya tienen en mente lo que van a hacer y yo creo que va a ser un buen lugar para visitar y entretenerse.

 Para los que andamos en casas rodantes o motorhome no es problema pues uno tiene de todo , pero para campistas puede ser un problema hoy en día.

Aún así, el lugar tiene un gran potencial pues está al lado de una playa muy bonita llamada Playa La Zorra, donde uno baja caminando y llega en 5 minutos.

La costa se ve también muy bien desde el campamento pues queda en lo alto de la quebrada, por lo que las amanecidas, la vista después de la siesta y con el café de la tarde son muy bonitas.

Era diciembre por lo que inauguramos nuestro primeros chapuzones en el mar. Agua helada pero uno se acostumbra rápido.

Existen múltiples senderos para caminar con un paisaje muy bonito, descubriendo playas pequeñas acompañadas de humedales que le dan un entorno especial donde deambulan algunos patos.

También caminos que son buenos para andar en bicicleta y recorrer.

La playa La zorra también tiene el potencial de pesca pues salen buenos lenguados. Nosotros intentamos algo de pesca en las rocas a ver si salía una viejita pero al final solo salieron un par de jaibas.

Al segundo Día llegó mi amigo Pato Leguía que nos permitió compartir algunas experiencias de viaje, a pasar de que el tiempo fue corto pues nosotros ya emprendíamos el regreso.

Hasta acá este viaje, nos veremos en otro destino.